Un jugador principiante normalmente pierde muchas bolas dada su inexperiencia a seguir el recorrido de la bola y sobre todo el bote y trayectoria de ésta una vez depositada en el suelo. Así, la búsqueda de la bola se convierte en uno de los factores más importantes para ralentizar el juego y al resto de partidos.

Para este jugador novel y, en general, para el resto de avezados golfistas, uno de los principales errores consiste en no seguir la trayectoria de los golpes efectuados en el campo de prácticas, sobre todo los malos golpes. Un mal hábito que revierte en el campo, puesto que los golpes fallados en el campo tampoco se siguen.

El primer consejo es controlar el recorrido de todos los golpes en el campo de prácticas; primero para habituarse a captar rápidamente la salida de la bola y los usuales botes y trayectorias que ésta toma una vez en el suelo.

En muchas ocasiones, el golfista acostumbra a contar los golpes efectuados en el putting green, el número de calles cogidas desde el tee, los greenes alcanzados en regulación etc. Una de las formas de mejorar su tarjeta y de agilizar el juego, es no contar los golpes de penalziación por bola perdida.
Si a pesar de estos consejos, continúa mandando la bola muy lejos de la calle, es hora de recibir un par de lecciones de la federación de su comunidad y de su profesor particular.

Finalmente, no nos olvidemos de que el golf es simplemente un juego y lo practicamos para pasarlo bien. Aunque a veces se nos olvida.

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